Otro año más se desarrolla el programa ‘Vacaciones 2018: una experiencia única’, una iniciativa permite que niños saharauis visiten en verano España gracias a una serie de familias que los acogen.
En nuestra región, los niños pueden disfrutar de un programa de actividades, centradas en la atención socio-sanitaria y en la mejora de sus capacidades socioeducativas e interculturales. Durante los meses de julio y agosto, ciudades y pueblos de Extremadura acogen a estos niños y niñas saharauis que proceden de los Campamentos de Personas Refugiadas de Tinduf, Argelia. A pesar de la implicación de la sociedad extremeña, aún harían falta unas 40 familias de acogida para atender todas las solicitudes.
En Extremadura, el proyecto se inició hace más de 20 años. Son familias que abren las puertas de su hogar y regalan su ilusión a niños procedentes del Sáhara con edades comprendidas entre los 8 y 12 años. Este proyecto busca conseguir mayor solidaridad y colaboración de los ciudadanos con el pueblo saharaui. No obstante, el programa continúa durante todo el año con talleres de sensibilización para diferentes grupos.
Nuevas familias se han incorporado motivadas por participar en este proyecto y conocer a los niños y a las familias de otras ediciones del programa. Las nuevas familias van acompañadas por el comité de ‘Vacaciones en paz’, que está conformado por personas de diferentes Asociaciones de Solidaridad con el Pueblo Saharaui que se agrupan en la Federación Sáhara Extremadura (Fedesaex).
El comité ‘Vacaciones en paz’ se encarga de la formación, la ayuda y la resolución de dudas de las familias, y también de todos los requisititos administrativos para la llegada de los niños.
