El Martes Santo, con aforo limitado, se llevó a cabo en la parroquia Nuestra Señora de Gracia de Ribera del Fresno un concierto Sacro ofrecido por la Banda Municipal de Música y Asociación Músico Cultural Santa Cecilia de la localidad.
Fueron 90 minutos de concierto, con la colaboración del Ayuntamiento, la propia parroquia y la villafranquesa y saetera María de Toro, con dirección del cortegano afincado en la villa ribereña Berna Sabido Cintas.
Tras dar la bienvenida Sabido se dirigió a un público entregado: “Este concierto sacro es un concierto especial, primero porque desde la pandemia hemos podido juntarnos muy poco, y segundo por el año que llevamos tan complicado para la banda y complicado para la cultura en general”.
Asimismo agradeció a quienes lo habían hecho posible: “a don Nemesio, nuestro párroco, por cedernos la parroquia y su predisposición a realizar este concierto; al ayuntamiento por su colaboración, por no dejar morir a su banda y gracias al cual hoy estrenamos atriles para todos los músicos y director; también a nuestros amigos de la Cofradía de Fuente del Maestre Nuestro Padre Jesús Nazareno María Santísima de la Soledad y San Juan Evangelista, a la que acompañamos cada Miércoles Santo, por acompañarnos hoy aquí también presentes; gracias también a todos ustedes por estar aquí apoyando a su banda y a la cultura en Ribera; gracias a María de Toro por su colaboración desinteresada y su disposición para realizar este concierto, hoy disfrutaremos de su gran voz y de su arte”.
Hacía especial hincapié cuando, emocionado tras un largo año de pandemia que les ha impedido todo tipo de actividad, un aplauso arropaba ese instante que así lo expresaba su rostro. “Sobre todo me gustaría agradecer a estos 32 valientes que están aquí, a mí banda por mantener viva la cultura por mantener viva su banda por el trabajo de este último ensayo preparando todo para este concierto, porque se exponen a este maldito virus en cada ensayo pido por favor un aplauso para todos ellos”.
El programa del concierto puso en escena las marchas procesionales ‘Concha’, ‘Passio granatensis’, ‘Aires de Triana’, ‘Costalero’ y ‘Mi amargura’. ‘Pureza marinera’, con la colaboración de María de Toro y los trompetas cantando, daría paso a ‘Jerusalén’, ‘En el cielo de tus ojos’ y de nuevo ‘Saeta’, con la colaboración de María de Toro, para cerrar.
Para Berna es el primer concierto sacro que se lleva a cabo en Ribera: “yo llevo 10 años aquí y jamás hicimos un concierto sacro; es verdad que de las primeras veces que yo vine al pueblo se hizo uno en la ermita del Cristo, no recuerdo la fecha, yo aún estaba en el Conservatorio o todavía estudiando, hablamos de cuando se creó la filarmónica de Villafranca y nos juntamos ahí muchos músicos de toda la provincia de Badajoz. Recuerdo que tras esta actuación en Ribera haríamos la de Villafranca. Algo complicado, se ensayaba los sábados por la mañana y al final, no sé por qué, desapareció, pero es verdad que el primer concierto sacro que yo recuerdo fue ese, en el Cristo, tras la creación de la Banda Filarmónica de Villafranca”.
Juan Francisco Llano Báez