Miguel Ángel Marín, al que todos conocemos como Migueli, se presenta, con el corazón en la mano y la guitarra al hombro, para dar a conocer su nuevo libro, ‘Enamorao de la vida, aunque a veces duela’, título inspirado en la letra de la icónica canción de Kiko Veneno ‘Volando voy’, que inmortalizó otro de los grandes, ‘Camarón’, ambos muy importantes en la banda sonora de la vida de Migueli.
Migueli se licenció en Historia del Arte y Filosofía y Letras, tiene un máster en Musicoterapia y en Counselling (ayuda a personas que atraviesan conflictos), y es también especialista en Orientación Educativa. Pero, más allá de sus títulos y conocimientos, Migueli es un alma inquieta, un trovador contemporáneo que ha sabido utilizar su talento para dar voz a los que muchas veces no tienen voz.
Desde sus primeros acordes, Migueli ha compartido escenario con algunos de los artistas más influyentes de España, como Víctor Manuel, ‘Celtas Cortos’, ‘Rozalén’, Manuel Carrasco, ‘Pereza’, ‘Leiva’, Jorge Drexler, ‘Marwan’, ‘Bebe’, ‘Revolver’, ‘El canto del loco’, ‘La cabra mecánica’, Pedro Guerra, Carlos Núñez, Ismael Serrano, Manolo Tena o ‘Danza invisible’.
Pero Migueli no solo canta. Su compromiso social es tan grande como su talento musical. Compatibiliza su carrera musical con un trabajo de acompañamiento a personas en situación de vulnerabilidad social y riesgo de exclusión, como personas excarceladas o sin techo, ayudándoles a través de la música.
Y, aunque nunca los ha buscado, y son pocos para sus méritos, Migueli ha conseguido premios como el ‘Culturas 2009’ de la Junta de Extremadura, o el ‘Humanizar’ de la Fundación Humanizar y el Centro de Humanización de la Salud en 2016.
Ahora anda de ciudad en ciudad presentando su nuevo libro, y en Badajoz ha sido la Librería Colón la que se ha llenado de amigos para escuchar sus palabras, su música y a José Antonio Lagar en las labores de presentador.
En ‘Enamorao de la vida, aunque a veces duela’, Migueli lleva al lector por un viaje íntimo y profundo a través de sus experiencias, anécdotas y vivencias. Este libro no es solo un relato de su vida; es una invitación a ver el mundo a través de sus ojos, a sentir cada nota de su música y a comprender el poder transformador de las canciones.
El libro está lleno de momentos que harán reír, llorar y, sobre todo, reflexionar. Porque la vida, como bien dice Migueli, puede doler a veces, pero siempre merece la pena ser vivida con intensidad y pasión. Y esa pasión es la que Migueli ha volcado en cada página de este libro, desde su infancia en Extremadura hasta sus giras por Hispanoamérica, Portugal, Alemania, Inglaterra, Suiza, Estados Unidos o Canadá; cada experiencia ha sido una oportunidad para aprender, crecer y, por supuesto, componer.
En ‘Enamorao de la vida’ Migueli no se guarda nada. Nos habla de Maruja su madre, a la que siempre lleva en su corazón; de su maravillosa familia: Noa, Juan, Mara y Amparo, a quienes dedica este libro y toda su vida; de su manera de entender la fe; de sus éxitos y de sus fracasos; de sus alegrías y de sus penas; de sus encuentros con grandes figuras de la música; y de sus trabajos con personas en situaciones difíciles, como su amigo Manué, quien le enseñó lo importante que es convivir con la gente profundamente diferente.
Y es que, como buen filósofo y cantautor, Migueli sabe que la vida es un camino lleno de aprendizajes. Un camino en el que cada paso, cada canción, cada encuentro, nos enseña algo nuevo. Y en este libro comparte todas esas enseñanzas de una manera cercana, honesta y profundamente humana, y muestra que la vida es un equilibrio constante entre la luz y la sombra, y que es precisamente ese equilibrio el que da sentido a todo.
