El director del festival Stone & Music, Carlos Lobo, ha presentado el balance de la sexta edición de este certamen, que se ha desarrollado íntegramente en el Teatro Romano de Mérida y que finalizó el pasado domingo con el concierto de Robe.
Carlos Lobo ha desgranado los datos de público, destacando que el 20% de los asistentes, casi 7.000 personas, tenía nacionalidad extranjera, la mitad de ellos residentes en España. Se han registrado hasta 20 nacionalidades distintas, además de la española, registrando visitantes de países tan dispares como Australia, Singapur, Finlandia, China, Japón, Estados Unidos, Israel, Argentina, Emiratos Árabes o Rusia, además de otros países de la Unión Europea.
Por lo que respecta al público español, los asistentes procedentes de Badajoz y Cáceres ocupan los primeros puestos por entradas adquiridas, seguidos de madrileños, andaluces y catalanes. Además han asistido espectadores de otras 15 provincias españolas. Como dato curioso, en los conciertos de Andrea Bocelli y Plácido Domingo los asistentes extremeños han estado en minoría, con un 28% y un 24% del total, respectivamente.
Uno de los grandes retos a los que se enfrentaba el Stone & Music de este año, y del que se encuentra especialmente satisfecho Carlos Lobo, ha sido la implementación de la primera parte del plan de accesibilidad sensorial.
Audiosigno que se ha encargado de la accesibilidad auditiva, ha realizado ocho préstamos a personas con dificultades auditivas: cuatro de mochilas vibratorias y cuatro de bucles magnéticos; se han realizado 55 acompañamientos a personas con movilidad reducida por parte del equipo de Cruz Roja; y se ha asistido a una decena de personas con discapacidad visual, facilitando su acceso, acomodo y salida del Teatro.